La vida de Frida Kahlo.

La vida de Frida Kahlo.

La vida de Frida Kahlo.

“Le gustaba afirmar que habia nacido en 1910, no porque quisiera parecer más joven, sino porque fue el año de la Revolución mexicana y ella era ante todo una revolucionaria.”

Magdalena Carmen Frieda Kahlo y Calderón. Nació el 6 de julio de 1907 en Coyoacán, entonces un suburbio de la ciudad de México. Frieda, quien de adulta optó por quitar la “e” de su nombre para que tuviera menos apariencia germana, fue la tercera de las cuatro hijas del fotógrafo de origen alemán Guillermo Kahlo, que había emigrado a México en 1891, y de Matilde Calderón, mestiza de orígenes españoles e indígenas mexicanos, y segunda esposa de Guillermo.

A pesar de la claridad sobre la fecha de su llegada al mundo, que consta en su certificado de nacimiento, a Frida le gustaba decir que había nacido en 1910, porque era la fecha de la revolución mexicana; y ella, desde muy joven, se consideraba sobre todo una revolucionaria.

Después de dar a luz a Frida, su madre Matilde enfermó, y no pudo cuidar de su hija recién nacida, por lo que la puso a cargo de una nodriza indígena mexicana. Frida, de adulta, siempre dijo que el gran amor, visceral, atávico, que sentía por su país, se debía a que había sido amamantada con leche de México desde que nació. Una idea que plasmó gráficamente en su cuadro de 1937, “Mi nana y yo”.
La infancia de Frida transcurrió en el México revolucionario, sumido en una gran agitación política, que, a partir de 1920 se transformó en una guerra civil. La clase media ilustrada buscaba más libertades políticas, y los campesinos peleaban por el reparto de la tierra, para que la revolución arrebatara a los terratenientes y sus capataces, las haciendas, para que les concedieran los derechos básicos. Tierra y libertad, fue el telón de fondo de la revolución mexicana, en el que se orientó la cada vez mayor conciencia política de Frida.

FECHAS SEÑALADAS

1913. A los seis años de edad Frida contrae la polio-mielitis, tras la que le quedará la secuela de la pierna derecha deformada y más corta, y el pie derecho torcido.
Frida asiste al Colegio Alemán, una escuela infantil alemana en la Ciudad de México.

1922. Frida comienza sus estudios en la prestigiosa Escuela Nacional Preparatoria, donde es una de las 25 niñas de un total de 2.000 alumnos. Se orienta hacia la medicina. El gobierno mexicano promueve la pintura de murales en edificios públicos como canal para educar a la población analfabeta, para trasmitirles los valores de la Revolución, naciendo así el frutífero muralismo mexicano. Esto es decisivo en su vida, porque conocerá a Diego Rivera por primera vez cuando éste trabaja en su mural “La creación” en el anfiteatro de su escuela. Frida se une a “Los Cachuchas”, grupo de jóvenes con ideas socialistas y mexicanistas, que debía su nombre al gorro de tela que gustaban llevar, como símbolo de subversión contra el rígido código de vestir de la época. Es en este año cuando Frieda cambia su nombre por Frida.
1924. Frida ayuda a su padre en el estudio de fotografía, y aprende los procesos y las técnicas del oficio.

1925. Frida trabaja en el estudio del impresor Fernando Fernández, quien, viendo sus dotes artísticas, la anima a dibujar.
El 17 de septiembre, Frida resulta gravemente herida en un accidente.

1927. Frida se afilia al Partido Comunista Mexicano. Aunque ella cuenta en sus diarios que ya se había afiliado a la juventud comunista en 1920, es decir, a sus 13 años. Conoce más a fondo a Diego Rivera, que la pinta como una revolucionaria armada dentro de la obra “El arsenal”, del conjunto muralista “Corrido de la revolución proletaria”, que Diego pinta en la Secretaría de Educación Pública. Se enamora de Diego Rivera.

1929. Se casa con Diego el 21 de agosto de 1929, y deja de vivir en la Casa Azul, su casa de la infancia, trasladándose con Diego a Cuernavaca, donde él está pintando un mural.

1930. Frida tiene un aborto como consecuencia de un embarazo inviable. Se traslada con Diego a San Francisco, donde éste ha recibido un encargo de trabajo. La pierna derecha comienza a provocarle cada vez más dolores.

1932. Se trasladan a Detroit, donde Diego ha recibido otro encargo. El segundo embarazo de Frida también se muestra inviable y termina con un aborto espontáneo el 4 de julio.

1933. En marzo van a vivir a Nueva York, donde Diego tiene el contrato para pintar un mural en el Rockefeller Center.
1934. Otro embarazo de Frida, el tercero, termina infelizmente al tercer mes de gestación. Le operan el pie derecho, del que le amputan varios dedos. Vuelve a México.

1935. Se separa de Diego Rivera, al conocer que ésta ha tenido un romance con Cristina Kahlo, la hermana pequeña de Frida.

1936. Vuelve a unirse con Diego Rivera.

1937. El 9 de enero llega a México León Trotski, con su esposa, la revolucionaria Natalia Sedova. Frida los aloja transitoriamente en su Casa Azul, donde ha vuelto a vivir.

1938. Conoce al surrealista André Breton, que la visita en México. Expone por primera vez en solitario en la Julien Levy Gallery de Nueva York, adonde viaja para la exposición. Muestra 25 obras, de las que vende la mitad.

1939. Regresa a México, reinstalándose en la Casa Azul. Su obra se expone en la Colle Gallery de Paris, con gran éxito, y promovida por André Breton. Gracias a él los pintores surrealistas la consideran una como ellos, a pesar de que Frida siempre niegue pertenecer a tal movimiento, considerándose completamente realista, dice que sólo pinta lo que le pasa.

1940. Viaja a San Francisco para tratar sus dolores con el doctor Eloesser, a quien conoció en su viaje de 1930. El 8 de diciembre, en los EE. UU, vuelve a casarse por segunda vez con Diego Rivera.

1941. Muere su padre, a quien estaba muy unida, Guillermo Kahlo, de un infarto de miocardio.

1943. Frida comienza a dar clases en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado. Aunque debido a los problemas de salud, los alumnos deben asistir muchas veces a sus clases en la Casa Azul.

1944. Frida obtiene el segundo premio de la exposición de arte anual, con su cuadro “Moisés”.

1948. Se vuelve a afiliar al Partido Comunista de México, del que se había alejado en 1929.

1950. Frida pasa nueve meses en el hospital, donde la someten a siete operaciones en la columna vertebral.

1951. Queda casi confinada a moverse en silla de ruedas, y a tomar muchos analgésicos, contra sus constantes dolores.

1952. Se implica en el movimiento mundial por la paz. Participa en manifestaciones.

1953. Se inaugura una gran exposición en solitario en la galería Lola Álvarez Bravo, de Ciudad de México. En agosto del amputan la pierna derecha por debajo de la rodilla, debido a que, por problemas de riego, se le había gangrenado.

1954. El 2 de julio participa en una manifestación por la paz y contra la intervención de los EE. UU. en Guatemala. Es su última aparición en público. La madrugada del 13 de julio, tras haber sufrido una fiebre elevada durante varios días, fallece en su cama de la Casa Azul. El parte oficial dictamina una embolia pulmonar.

En 1927. Diego Rivera, pinta a Frida Kahlo como una revolucionaria armada dentro de la obra “El arsenal”, del conjunto muralista “Corrido de la revolución proletaria”

El Accidente de Frida Kahlo

El Accidente de Frida Kahlo

El Accidente de Frida Kahlo

17 de Septiembre de 1925

El 17 de septiembre de 1925 Frida viajaba en un autobús que fue embestido por un tranvía. Murieron varias personas en el brutal impacto, y Frida sufrió graves heridas, que la afectarían durante toda su vida. El pie derecho, y la pierna derecha, ya muy debilitados por la poliomielitis, quedaron aplastados. Una barra de metal le atravesó la pelvis. Tardó un mes en salir del hospital, y otros tres meses hasta que pudo ponerse en pie. Sufrió los siguientes daños: una clavícula rota; la tercera y la cuarta costilla, fracturadas; tres fracturas pélvicas; once fracturas en la pierna derecha, y el pie derecho aplastado y dislocado.

Alejando Gómez Arias, líder de “Los Cachuchas” y novio por entonces de Frida, que la acompañaba, contó cómo la ropa de Frida estaba desgarrada, llena de sangre y de polvo de oro, que, al parecer, llevaba un pasajero al que se le había desparramado con el accidente. Frida aparecía inundada de rojo y dorado; y mientras Gómez Arias la sacaba entre los hierros retorcidos del autobús, la gente gritaba: “la bailarina, la bailarina”. Por los llamativos colores, habían confundido a Frida con otra artista.

Cuando México rompió sus cadenas.

Cuando México rompió sus cadenas.

Cuando México rompió sus cadenas.

La lucha contra el capitalismo, las injusticias y la opresión de los trabajadores y de los pueblos, siguen manteniendo la llama de Emiliano Zapata por un mundo más justo.

Acabamos de dejar el año del centenario de la muerte de Emiliano Zapata (1919-2019), y cien años después de su desaparición física, sus ideas y su ejemplo de lucha siguen muy presentes en el día a día de millones de personas del mundo entero. Allí donde hay injusticias, donde hay campesinos sin tierras, donde se encuentran los oprimidos, se escucha el grito del valiente guerrillero.

El movimiento zapatista sigue muy vivo:
Recordamos que nada más comenzar el año 1994, el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional liderado por el Subcomandante Marcos (desde 2014 pasó a denominarse Subcomandante Galeano) inició una insurrección armada en el estado de Chiapas al Sur de país. La lucha armada continuó hasta 2006 y desde entonces es un movimiento político que mantiene las reivindicaciones y la lucha contra el capitalismo, las injusticias y la opresión de los trabajadores y de los pueblos, en definitiva siguen manteniendo la llama de Emiliano Zapata por un mundo más justo.

LA MUERTE DE ZAPATA

Era el 10 de abril de 1919, en la Hacienda de Chinameca, estado de Morelos, Emiliano Zapata, el indomable guerrillero caía acribillado por una vil traición.
Zapata fue víctima de la traición, algo que durante toda su vida temió y odió con toda su fuerza. Un complot orquestado con gran cuidado por el coronel Jesús Guajardo mano ejecutora de su jefe el general Pablo González, autor intelectual del asesinato. Ambos al servicio del carrancismo y por lo tanto enemigos del movimiento revolucionario campesino de los zapatistas.

La traición se fraguó de la siguiente manera:
Llegaron rumores a Zapata de desavenencias entre algunos oficiales carrancistas. Éste escribió una carta a Guajardo intentado convencerle para que se sumara a la rebelión. Dicha carta la interceptó el propio Pablo González, y la utilizó como medida de presión y chantaje a su subalterno. Guajardo para reivindicarse y mostrar su lealtad al jefe, inicia un plan aprovechando la ocasión y responde al guerrillero para hacerle creer que está descontento con Carranza y está pensando unirse a él. Además, Guajardo sabiendo que los zapatistas están muy necesitados de municiones, promete al caudillo del Sur la entrega de miles de cartuchos.
Zapata fue durante toda su vida muy desconfiado y cuidadoso, por lo que para comprobar su lealtad pide a Guajardo que fusile a los hombres que tenía presos de Victoriano Bárcenas (antiguo zapatista que estaba causando muchos estragos en Morelos). Éste accede y fusila a varias decenas de los soldados de Bárcenas que militaban en las filas carrancistas.

El 9 de abril de 1919, Zapata y Guajardo se conocieron personalmente en Tepalcingo. Emiliano lo felicitó por incorporarse a la causa del plan de Ayala y brindaron. Sabedor de que una de las grandes pasiones de Zapata eran los caballos, como muestra de buena voluntad, Guajardo le regaló un caballo alazán, llamado el ”As de Oros” . El coronel expresó a su nuevo jefe, que le entregaría los cartuchos al otro día en la hacienda de San Juan Chinameca (dicen que le prometió más de diez mil).
Paradojas del destino, aquel hombre que había hecho de la desconfianza una virtud, confió por vez primera y fue suficiente para ser alcanzado por la muerte.

Salvador Reyes Avilés, fue secretario particular del gran guerrillero, y como testigo directo redactó el parte oficial de su muerte, y describió de la siguiente forma aquellos trágicos momentos:
“(Ordenó Zapata)“ Vamos a ver al coronel y que vengan nada más diez hombres conmigo”. Y montando su caballo, se dirigió a la puerta de la casa de la hacienda. Lo seguimos diez, tal como él lo ordenara, quedando el resto de la gente muy confiada, sombreándose debajo de los árboles y con las carabinas enfundadas. La guardia formada parecía preparada para hacerle los honores. El clarín tocó tres veces llamada de honor, y al apagarse la última nota, al llegar el general en jefe al dintel de la puerta, de la manera más alevosa, más cobarde, más villana, a quemarropa, sin dar tiempo para empuñar las pistolas, los soldados que presentaban armas descargaron dos veces sus fusiles y nuestro inolvidable general Zapata cayó para no levantarse más”. (Ref.: Salvador Reyes Avilés, “Parte oficial sobre la muerte de Zapata” 10 de abril de 1919, en “Emiliano Zapata” de Octavio Paz Solorzano, pp. 377-378).

EL PLAN DE AYALA

El 28 de noviembre de 1911 (apenas un año después de iniciada la revolución mexicana), en la localidad de Villa de Ayala (actualmente Ciudad de Ayala), situada en el Estado de Morelos, al sur de México, fue proclamado el texto más importante para los zapatistas, el Plan de Ayala. Desde entonces los gritos revolucionarios campesinos de TIERRA Y LIBERTAD, y LA TIERRA ES DE QUIEN LA TRABAJA, no han parado de sonar en el sur de México.
El Plan de Ayala consta de 15 puntos y entre las consignas más importantes están la del desconocimiento de Madero como presidente de México por considerarlo traidor, y el reparto de las tierras que acapararon los hacendados así como la restitución de los terrenos que fueron despojados durante el porfiriato.

Zapata y sus compañeros decidieron levantarse contra Francisco Madero e iniciar una nueva revolución dentro de la revolución ya existente, por la desconfianza y las pocas esperanzas que tenían en que el nuevo gobierno cambiase realmente la situación de los campesinos ya que veían que no iba a ser los suficientemente ambicioso con la reforma agraria y las reivindicaciones campesinas.
A continuación se hace un breve resumen del momento histórico: Había transcurrido un año desde que  Francisco Madero mediante el Plan de San Luis -(20/11/1910), con-vocara al pueblo a levantarse en armas contra el dictador Porfirio Díaz, lo que originó el inicio de la revolución mexicana. Durante el año 1911, con el dictador ya huido, hubo enfrentamientos entre las fuerzas maderistas y las tropas leales al régimen. El irrepetible guerrillero Pancho Villa ya comenzaba a infundir respeto en el norte del estado mexicano en apoyo de la Revolución maderista.
Se llevaron a cabo elecciones presidenciales en octubre (1911), en las cuales salió elegido Francisco Madero como presidente del país.
Emiliano Zapata y su gente, que ya habían comenzado la revolución campesina en el Estado de Morelos triunfando en pocos meses frente a las fuerzas federales porfiristas, solicitaban a Madero una reforma agraria profunda. Pedían la colectivización de todas las tierras que estaban en manos de explotadores, caciques y grandes terratenientes para que pudieran ser gestionadas exclusivamente por aquellos que trabajaban la tierra, los campesinos y jornaleros.

BREVE ESBOZO DE LA REVOLUCIÓN MEXICANA

El 20 de noviembre de 1910, Francisco Madero con el Plan de San Luis de Potosí, convoca al pueblo mexicano a levantarse en armas para derrocar al tirano Porfirio Díaz, comenzaba así la Revolución mexicana. No podemos olvidar a los hermanos Flores Magón, verdaderos precursores del movimiento revolucionario.
En la que fue la primera Revolución política del siglo XX, se debe destacar por encima de todo que el peso principal de la lucha arrancó y se desarrolló desde las capas más bajas y oprimidas de la sociedad. Sin embargo, como en tantas otras revoluciones, los intereses liberales de la burguesía terminaron por imponerse a los ideales de libertad y justicia del pueblo. Un sector de aquellos primeros combatientes, se encaramó al poder y terminó por traicionar la verdadera esencia de la revolución de la forma más abyecta, en aras de un capitalismo que favoreciese exclusivamente a las clases acomodadas. Quienes representaron un problema o provocaban cierto grado de incomodidad hacia estos oscuros intereses del nuevo poder, fueron aniquilados. En 1919 asesinaron a Zapata como ya hemos explicado anteriormente, y cuatro años más tarde hicieron lo propio con Villa (cuando ya se encontraba totalmente retirado de la lucha armada y de cualquier escenario político).

La revolución mexicana fue la primera gran revolución del siglo XX, y tuvo importantes ecos y repercusión principalmente en América Latina. Un proceso social y político, que encumbró a la categoría de mitos a incansables guerrilleros del pueblo como Pancho Villa y Emiliano Zapata, que provenían de la clase más olvidada y explotada de la sociedad, la indígena. Los oprimidos, los braceros, los campesinos, los sin tierra, se levantaron contra sus amos, contra los ricos hacendados y enseñaron sus dientes.
Fruto de la revolución, en 1917 se creó una Constitución muy avanzada para su tiempo (de hecho a día de hoy sigue vigente), que fue ejemplo para muchos países del mundo, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Se considera la primera Constitución que integró Derechos Sociales en su texto, procedente sin duda de las luchas de las clases populares en la revolución.
Pudo haber sido más ambiciosa y más revolucionaria, pero los acontecimientos inclinaron la balanza hacia el lado moderado de la revolución. La burguesía liderada por Venustiano Carranza había resultado vencedora entre los años 1915 y 1916 derrotando al campesinado y a las fuerzas populares revolucionarias, lideradas por Villa en el norte y Zapata en el sur.
Un siglo después, con gran tristeza y preocupación observamos que México se desangra día tras día. Al infinito grado de corrupción de los sucesivos gobiernos se le añade el gravísimo problema del narcotráfico, el terrorismo de estado con sus hordas de paramilitares, los intereses del atroz capitalismo de grandes multinacionales yanquis, que someten a buena parte de la población a un estado de explotación y miseria, apropiándose injustamente de los recursos naturales que realmente pertenecen a todos los mexicanos y mexicanas.
Con el triunfo electoral de Manuel López Obrador a finales de 2018 llegaron algunos rayos de luz para pensar en la esperanza, y esperemos que México pueda dar un giro hacia la izquierda con políticas en favor de la clase trabajadora.

Para terminar, creo que el noble y guerrero espíritu de Zapata y Villa nos debe acompañar cada día, para que nos rebelemos ante toda forma de injusticia y sobre todo ante este sistema tan despiadado e injusto que padecemos, el capitalismo. Ojalá que el actual gobierno mexicano siga el ejemplo de estos guerrilleros y del resto de revolucionarios que pusieron en pie a México hace más de un siglo.

Pinto FLORES para que así no se MUERAN

Pinto FLORES para que así no se MUERAN

Pinto FLORES para que así no se MUERAN

Recuperar el orgullo de siglos de lucha contra los elementos naturales, la opresión social y económica y la opresión patriarcal.

Con esta preciosa metáfora Frida Kahlo explicaba su voluntad de ayudar a conservar aquello que conside-raba admirable y digno de ser legado a las siguientes generaciones para que, así, también ellas lo pudieran disfrutar y admirar.

Frida ha sido estudiada, interpretada y reinterpretada en numerosas ocasiones y bajo multitud de prismas. Pero al menos hay dos características que se señalan de manera casi unánime: su perfil feminista y su interés en la cultura popular/ rural.

Y no es casualidad que ambas cuestiones vayan unidas. Las mujeres, a lo largo de la historia, los países y las distintas civilizaciones, han sido guardianas, cuidadoras y transmisoras de la cultura popular, una de cuyas máximas expresiones es, probablemente, eso que denominamos genéricamente “cultura rural” en la que el papel de las mujeres como custodias sigue estando más vigente incluso hoy día. La mujer como transmisora de saberes, tradiciones y raíces, aprendidas y enseñadas a través de canciones, historias o “fórmulas mágicas” que enseñaban a conjurar miedos y peligros.

A pesar de que en multitud de ocasiones se ha denostado esa cultura rural por ser poco elevada o reflejo de valores que transformar (conservadores, machistas), lo cierto es que esa visión de la cultura rural dejó hace tiempo de ser tan parcial. No podemos negar que el poder ejercido por fuerzas conservadoras y patriarcales ha alentado un tipo de cultura popular y rural afín a sus intereses que son, qué duda cabe, perpetuar los valores que permiten el mantenimiento del statu quo.

Sin embargo, debajo de la cultura popular que es casi, en ocasiones, poco más que un estereotipo pobre y vacío, late una enorme corriente de expresión en la que se encuentran muchos otros valores, en la que hallamos una forma de explicar el mundo fuertemente vinculada a la tierra, a los recursos, a la realidad tangible que rodeaba a nuestras hermanas de tierra (como definieron, de manera preciosa, María Sánchez y Lucía López). Una cultura escondida porque también tenía una componente fuerte de rebeldía frente a lo que era injusto: canciones de burla y rechazo a los señores, a los maridos que no compartían los trabajos y trataban mal a las mujeres, de rebeldía frente a los condicionantes sociales. Canciones que nunca se grabaron, ni llenaron teatros, pero que se transmitían por generaciones cantándose en lavaderos, cocinas y faenas en el campo.

Canciones e historias que reflejaban años de sentimientos y realidades sociales cambiantes.

Pero también hoy existe ese latido. En los bordes de nuestra sociedad, en las heridas de nuestro territorio que es eso que llamamos “la España Vaciada”, existe una cultura rural y feminista llena de vida. No piden ayuda, ni quieren que se les dé voz, porque ellas tienen su propia voz.
Es respeto y visibilidad lo que necesitamos: estar en pie de igualdad, sin estereotipos ni tutelajes.

Este 2018 celebrábamos el Año Europeo del Patrimonio Cultural y, como su propio lema indicaba, se trataba de “un año para la reivindicación, la puesta en valor, y la interpretación de todos los patrimonios culturales”. Y no es posible hablar de todos los patrimonios culturales sin contar con el mundo rural que representa el 80% del territorio del Estado Español, ocupa el 72% de la superficie total del territorio y donde encontramos el 100% de nuestro Patrimonio Natural.

Existe un extenso (aunque demasiadas veces desconocido) patrimonio arqueológico, histórico-artístico, natural, industrial, eclesiástico, civil … Un patrimonio material e inmaterial, cuyo mantenimiento supone la conservación de la identidad de un entorno y de sus habitantes, así como la garantía de su pervivencia y disfrute para generaciones futuras.

Incluso, como parte de la tan necesaria lucha contra el cambio climático y la, también, necesaria adaptación a las condiciones cambiantes en nuestro entorno, la cultura rural ha sido guardiana de sistemas de trabajo que son verdaderas fuentes de tecnología adecuada. Actualmente, estos procesos etnológicos están amenazados por el olvido colectivo debido a que se ha interrumpido el conocimiento transgeneracional de estos sistemas de trabajo, que también son fuente de creatividad artística y esta pérdida de memoria es debida en gran parte al avance de la despoblación rural.

Reconocer y admirar a Frida Kahlo también es reconocer y exprimir su mejor legado. Pintar flores para que no mueran es reivindicar, como ella misma hizo, la necesidad de poner en el centro, visibilizando, la cultura rural, popular y profundamente feminista que se hace en las heridas de nuestro territorio. Recuperando el orgullo de aquello que hacemos para celebrarnos a nosotras mismas y celebrar que estamos vivas en nuestros territorios.

Recuperar el orgullo de siglos de lucha contra los elementos naturales, la opresión social y económica y la opresión patriarcal.

Recuperar el orgullo de venir de una lucha de siglos, de abuelas que nos contaron historias.

Eva García Sempere

Exparlamentaria en el Congreso de los Diputados por Unidas Podemos.
Coordinadora federal del área de Medio Ambiente y Ecología de Izquierda Unida.

Contraofensiva Frida Kahlo

Contraofensiva Frida Kahlo

Contraofensiva Frida Kahlo.

“Este número de Herri representa una contraofensiva ideológica en ese universo mercantilizado de Frida.”

De nuevo, como en los números sobre Picasso y sobre Miguel Hernández, Herri aborda en sus páginas una monografía sobre una artista muy conocida y popular. Y muchos se preguntarán:

¿Qué novedades sobre Frida Kahlo puede aportar esta revista?

Pues ante esta lícita pregunta debemos responder como lo hacíamos en aquellos números: que si Herri es una publicación que ha nacido justamente para desempeñar una labor en la batalla de la cultura, en la lucha por las ideas, para ensanchar el campo del pensamiento crítico con esta sociedad y ampliar la base de los partidarios de otra sociedad, socialista, que supere al capitalismo; si hemos nacido para eso, un trabajo específico e inexorable que debemos hacer, casi el primero, es no dejarnos arrebatar nuestros héroes y heroínas por el adversario, no permitir que el sistema, el “establishment”, se apropie impunemente de nuestros mejores pensadores, artistas, poetas, y los convierta en iconos vacios de contenido revolucionario, en mitos al servicio del consumo.

Esa tendencia, la de recuperar en números monográficos a los más brillantes exponentes de la cultura, “populares”, de inequívoca militancia comunista, será una constante en la trayectoria de la revista, para rescatar su autenticidad; y para rendir justicia a nuestra propia memoria histórica, tan valiosa y que tantas veces descuidamos u olvidamos.
Otros, quizá, puedan pensar que somos unos oportunistas y que nos subimos al carro de la moda de Frida Kahlo, cuando se trata precisamente de lo contrario. Como acabo de decir, queremos recuperar a nuestra gente, a nuestros poetas, a nuestros pintores, a nuestros escritores, volver a ellos con sus propias e inequívocas palabras, volverlos a su ser original, sanarlos de la podredumbre en la que son trasformados en las manos del enemigo.

Y Frida Kahlo seguramente es el caso más paradigmático. Existe hoy en día una omnipresencia del icono Frida, en camisetas, carteles, en multitud de objetos de lo más variopinto, desde zapatillas de deporte, a joyas y lencería, hasta en corsés con cristales de Swarowski. Al parecer, existe una firma detrás, que se lleva una comisión por cada producto de consumo vendido, por cada camiseta, por cada objeto, la Frida Kahlo Corporations, FKC. Frida murió sin descendencia, y hasta el año 2005 era su sobrina, Isolda Pinedo Kahlo, quien poseía los derechos de comercialización del nombre de la artista.

Hasta esa fecha la comercialización de su marca se movía en un terreno económico más bien modesto. Es en ese año 2005 cuando la sobrina, con el fin de obtener más beneficios económicos, vende la marca a un empresario español, Carlos Dorado, un hombre que reconoce que desconocía por completo quién era Frida Kahlo cuando compró los derechos y montó la empresa para explotarlos; pero admite que, sin embargo, vio de inmediato el gran potencial de imagen de esa mujer fuerte, diferente y de gran personalidad. El gran despegue comercial, que lo ha hecho millonario, sucedió tras el éxito de la película sobre Frida protagonizada por Salma Hayek.
Desde entonces este empresario ha comercializado la marca FKC por todo el mundo, realizando acuerdos de colaboración con grandes compañías del sector, como Converse, Mattel, La Perla, Stradivarius, Mango o Primark.

Nada queda más lejos del pensamiento de la propia Frida que esta situación actual de su imagen, vaciada de su rebeldía, de su compromiso político y de su feminismo; nada más lejos de una Frida Kahlo miembro del Partido Comunista de México, cuyo féretro fue envuelto con la bandera roja con la hoz y el martillo. Por eso este número de Herri representa una contraofensiva ideológica en ese universo mercantilizado de Frida, para reinstalar, dentro de nuestra modestia y nuestras humildes posibilidades, el ideario comunista de la gran artista, prestándole nuestra voz para que el pueblo vuelva a visitar su arte con la pureza de la mirada original, y con el ansia de revolución que ella deseó.

Funeral de Frida Kahlo  Escanear para escuchar

Escanear para escuchar

Miguel Usabiaga

Arquitecto – Escritor
Director de Herri